miércoles, 20 de julio de 2016

Los titanes del cosmos


Los titanes del cosmos: las estrellas más grandes descubiertas hasta ahora.

"Egipto es un regalo del Nilo" decía Herodoto, padre de los historiadores. Con tales palabras quería expresar que toda la economía y el esplendor del Egipto faraónico dependía de la agricultura generada por el recorrido del río Nilo hasta el mar mediterráneo. De la misma forma, toda la vida en la Tierra es un regalo de nuestro Sol, fuente de energía y luz que es, en última instancia, el sostén de toda nuestra civilización.

El Sol nos atiende con solicita generosidad, permitiendo nuestra existencia, pero a escala cósmica es una modesta estrella en un remoto sector de la galaxia. Tiene un tamaño promedio, ni muy grande ni muy pequeña, y no puede presumir de récords o características especiales. Es una estrella amarilla de tipo G con un diámetro de 1.324.000 km., un tamaño sorprendente si lo comparamos con la Tierra, pero modestísimo si lo enfrentamos con otras monstruosidades que viven en las lejanías de nuestra Galaxia. 

Para empezar este recuento podemos pensar en Sirio (alfa canis maioris), la estrella más luminosa del cielo nocturno. Ubicada en la constelación de Canis Majoris, Sirio es una característica estrella blanca a unos 8,6 años luz de la Tierra. Es vez y media más grande que nuestro Sol (poco) y su intenso brillo (magnitud aparente -1,46) se debe exclusivamente a su cercanía.


Nuestro Sol frente a Sirio. A este nivel las comparaciones todavía son amigables, pero más adelante, enfrentado a otras divas, nuestro Sol parecerá un grano de arena.



"Una imagen vale más que mil palabras"


El Sol encarando a VY Canis Mayoris.

Una de las estrellas gigantes más interesantes y vistosas es Antares, situada en la constelación de Escorpión y de quien ya hemos hablado  en una entrada anterior. Antares es visible a simple vista, fácilmente ubicable en el cielo invernal gracias a su característico color rojizo, tan similar al planeta Marte que lleva a muchos observadores a confundirlos. Antares está situada a unos 550 años luz de nosotros y debe ser entre 850-900 veces más grande que nuestro Sol. 

Antares, a la izquierda de la foto, arde con todo su poder en el corazón de la constelación de Escorpión.

VY Canis Mayoris poseía el cetro del tamaño hasta que otras divas se lo arrebataron. Ubicada en la constelación del Canis Major (El perro mayor), es una hipergigante roja clase M ubicada a 3.800 años luz. Sería unas 1.500 veces más grande que nuestro Sol, aunque otras mediciones arrojan resultados fantásticos de hasta 2.800 radios solares. El problema con esta estrella (y con otras muchas) es que su lejanía y las nubes de gas que expulsa dificultan estudios más precisos sobre su tamaño, pero al margen de estos escollos, la estrella es un coloso de la galaxia.

Hay dos candidatas para ser la estrella más grande conocida hasta ahora: UY Scuti y Westerlun 1-26, y digo candidatas, porque su verdadero tamaño no ha podido ser precisado y hay todo un debate sobre cuál de las dos se lleva el trofeo.

UY Scuti es una hipergigante roja situada en la constelación del Scutum (Escudo), a unos 9.500 años luz de nosotros, las mediciones le dan un tamaño que estaría por los 1.700 radios solares, con un diámetro de 2.375.828 km. 

Vamos, para que dimensionemos: Si nuestro Sol fuese una pelota de 20 cm. de diámetro, UY Scuti sería una bestia de... ¡¡38 km. de largo!!

Es problemático obtener datos precisos y hay quienes piensan que su tamaño sería en realidad mucho menor. La estrella está oculta tras densas capaz de gas y polvo que dificultan un estudio acabado de sus características. de hecho, muchos datos que se obtienen al analizar estas estrellas se deben a las ondas de radio y en el infrarrojo.

En condiciones favorables, sin contaminación lumínica, UY Scuti es visible con telescopios medianos.


Nuestro Sol frente a UY Scuti...siempre debiésemos tener presente nuestra verdadera insignificancia cuando nos comparamos con las escalas cósmicas.


UY Scuti situada en la posición de nuestro Sol. Su tamaño rebasaría la órbita de Júpiter y amenazaría con devorar a Saturno.

Westerlund 1-26 se encuentra en la constelación de Ara (Altar), en el cúmulo estelar Westerlund 1. Fue descubierta el año 1961 y está situada a unos 11.500 años luz de nosotros, con un tamaño  entre 1500-2.500 radios solares. Es difícil precisar su tamaño exacto, debido a la gran distancia que nos separa de ella y porque la estrella está oculta tras nubes de polvo y gas que dificultan una estimación más precisa de su radio. Es tan grande que su propia fuerza de gravedad es insuficiente para asegurar la integridad de la estrella y ha expulsado una buena cantidad de materia al espacio. Es conocida por ser una poderosa fuente de ondas de radio. Westerlund 1-26 no es visible a simple vista, debido a su gran lejanía, y solo se detecta con telescopios de gran potencia. Este mastodonte es unas 300.000 veces más brillante que el Sol.

Como ven, aún no sabemos cuál de las competidoras ostenta el récord del tamaño, y esperamos que ulteriores estudios, a medida que la tecnología progresa, puedan zanjar la cuestión.


Situación de Westerlun 1-26, dentro del cúmulo homónimo.


Para finalizar, debemos decir que las estrellas más masivas tienen ciclos de vida mas cortos. Esto puede parecer contrario al sentido común, pero lo cierto es que las estrellas grandes consumen su combustible en forma más rápida y su vida puede durar apenas unos millones de años. Es como el ejemplo de la vela más grande: iluminará más que las otras, pero también se consumirá más rápido. En contraste, las estrellas medianas (como nuestro Sol) administran en forma más eficientes  su gasto energético y estiran al máximo su vida: el Sol ya tiene 5.000 millones de años y se calcula que  brillará por otros 5.000 millones.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...